Descenso al infierno

Deportivo Merlo descendió a la C, tras perder por 2 a 0 con goles de Franco Costa y Facundo Diz en su visita a Tristán Suárez y a raíz del empate de Colegiales, su rival directo en la lucha por la permanencia, ante Fénix.

Merlo tenía todo a su favor para seguir en la categoría, porque había ganado el duelo clave anterior cuando Colegiales perdió. Pero no supo aprovechar esa pequeña ventaja de depender de sí mismo y perdió ante un Tristán Suárez que necesitaba de los 3 puntos para entrar al Reducido. Sí, dos realidades opuestas.

El partido comenzó tranquilo, con pocas llegadas y sin mucho juego. Merlo intentó tener la pelota y manejar los tiempos del encuentro para lograr lastimar a su rival pero no tuvo éxito, mientras que el local sólo pudo inquietar a Rodrigo Llinás con pelotas paradas y Facundo Diz, el 9 del equipo, siempre jugó de espaldas al arco. Hasta ese momento, el empate era negocio para los dos: Colegiales perdía ante Fénix y Merlo zafaba (porque en ese caso no importaba su resultado), mientras que el “Lechero” clasificaba al Reducido.

El segundo tiempo fue distinto. Colegiales le había empatado a Fénix y eso encendía las alarmas de ambos equipos y tanto Merlo como Tristán se mostraron más agresivos a la hora de atacar. Por lo tanto, el técnico del local, Pedro Monzón, se vio obligado a realizar cambios los cuáles le dieron más dinámica al equipo. El “Lechero” manejaba el partido y Diz erró un mano a mano increíble ante Llinás. En Maschwitz, Colegiales daba vuelta el partido y el “Depo” tenía la obligación de buscar el gol que le asegurara la permanencia. Probó por derecha con Matías Rudler pero la actuación firme de Nicolás Agorreca le cerró el camino. Cuando Deportivo Merlo adelantó las líneas y arriesgó todo para encontrar el gol, Franco Costa encontró el hueco entre los centrales y abrió el marcador que ponía el 1 a 0 para el local. Otro gol de Fénix le daba una llama de esperanza al “Charro”, que nuevamente necesitaba un empate para no descender; pero nunca tuvo con qué. Sólo quedaba la opción del pelotazo al área y buscar el milagro, ya no se pensaba en el buen juego. Leandro Rodríguez tuvo sus oportunidades de marcar, pero en ninguna tuvo éxito. En el peor momento de Merlo, un rebote de un centro malogrado lo capturó Lautaro Baeza que ante la presión de los defensores de Tristán que salieron disparados del área, perdió la pelota que le quedó a Diz quien definió con el arco vacío ya que Llinás había ido a cabecear.

El sueño de quedarse en la B Metropolitana se había terminado con ese gol, con ese 2 a 0 que condenaba a Merlo a descender nuevamente de categoría en 2 años. Mientras que Tristán Suárez ganaba la chance de pelear por un ascenso a la B Nacional. Dos realidades extremas, que terminaron como tal.

Evelin Fleita